Álvaro Colom, presidente de Guatemala, quedó oficialmente divorciado de su esposa Sandra Torres, con lo cuál la ahora ex primera dama tiene el camino libre para participar en las elecciones presidenciales en septiembre.
La Constitución guatemalteca prohíbe que los familiares de un gobernante en funciones compitan por la presidencia, hasta el cuarto grado de consanguinidad (padres, hijos, tíos, hermanos y primos) y segundo de afinidad (el cónyuge y los parientes de éste).
La misma jueza que autorizó el divorcio, dijo a los medios que se interpusieron 15 recursos contra la separación, promovidos por varios grupos que alegan que la pareja está cometiendo “fraude de ley”.
Por su parte, la Presidencia aclaró que no hará ninguna declaración al respecto, porque se trata de “una decisión personal del mandatario”. Torres anunció sus intenciones de contender por la presidencia el pasado 8 de marzo; tres días después, la pareja presidencial interpuso la demanda de divorcio.
“Esta es una de las decisiones más importantes de mi vida, pues implica un sacrificio familiar y personal. Nuestro amor con el presidente es más sólido que nunca, y jamás ha estado sujeto a ningún papel. Sin embargo, el amor a Guatemala y nuestro compromiso con los más necesitados, lo es aún más“, dijo la ahora ex primera dama respecto al divorcio.
Fuente: Agencia EFE