Rubén Moreira y Guillermo Anaya, candidatos a gobernador del estado de Coahuila del PRI y el PAN, respectivamente, están a punto de cerrar sus campañas electorales entre escándalos, acusaciones y denuncias. Anaya ha sido acusado de tener nexos con el crimen organizado, así como de comprar ranchos a costos que están muy por debajo de su precio razonable. Esto se ha dicho en medios locales y nacionales.
Se afirma que Anaya tiene una relación cercana con Sergio Villarreal Barragán, “El Grande”, líder de los Beltrán Leyva en La Laguna. El hermano de Villarreal Barragán, Adolfo Villarreal Barragán, fue cuñado de Anaya desde 1996 hasta 2006. Adolfo Villarreal, según un testigo protegido de la DEA, era el responsable de trasladar la droga producida por ese cártel a Estados Unidos.
A Anaya Llamas no lo intimidan las encuestas electorales, que lo ponen en un lugar desfavorable.
Anaya Llamas se encuentra en un lugar poco favorable en las encuestas electorales, ya que está abajo de Rubén Moreira por 42 puntos. Sin embargo, el abanderado del PAN dice no sentirse intimidado ni asustado, pues hay muchos votos que han sido tapados. Las acusaciones también le tienen escondido. Por otro lado, a Rubén Moreira, del PRI, se le cuestiona sobre su parentesco con Humberto Moreira, dirigente nacional del Partido y ex gobernador del estado.
Por su parte, el candidato a la gobernatura de Coahuila que representa al Partido del Trabajo y a Convergencia, Jesús González Schmal, invitó a los habitantes del estado a reflexionar su voto. Ambos candidatos, según González Schmal, han hecho un derroche inaudito de recursos en las campañas de Moreira y Anaya:
“No debemos perder de vista que estamos en una elección de Estado, por un lado, el hermano del presidente del PRI, y por el otro el compadre de Felipe Calderón; entonces, no se tienen condiciones de equidad para los demás candidatos, de ninguna manera”, dijo González Schmal.
Fuente: Informador
Foto: SoluciónPolítica
