Gehad El-Haddad, portavoz de los Hermanos Musulmanes, ha alertado de que la violencia implica que la rabia, un día después de la masacre en Egipto, “está ahora fuera de control”.
Refugiado en un lugar que no quiso desvelar, El-Haddad desconoce dónde se encuentran todos los líderes del grupo tras los ataques. Afirmó, eso sí, que dos de ellos resultaron heridos y 6 perdieron “a sus hijos e hijas”.
“Después de los golpes, los arrestos y los asesinatos a los que estamos haciendo frente, las emociones están demasiado elevadas como para guiarnos”, recalcó.
“Está fuera de control. Siempre ha existido ese miedo. Y con cada masacre, se incrementa”, reconoció Haddad. “El verdadero peligro surge cuando los grupos de personas, enfadados por la pérdida de sus seres queridos, comiencen a movilizarse”.
Haddad insistió en que el conflicto ya no sólo tiene que ver con Mursi. “¿Vamos a aceptar una nueva tiranía en Egipto o no?”, se preguntó.
