José Antonio Meade Kuribreña afirma que México ha evadido “el riesgo de una relación monotemática con Estados Unidos.
En entrevista para el diario Crónica el secretario de Relaciones Exteriores, enfatizó que la relación bilateral es diferente a administraciones anteriores; hoy se dialoga sobre muchos temas y cada uno “va por su propio carril”.
¿Cuáles son los cambios relevantes en política exterior respecto a las administraciones inmediatamente anteriores.
Las instrucciones del presidente Peña Nieto son para “expandir nuestras pertenencias”: geográficas, económicas, culturales; para generar más oportunidades en beneficio del país.
“Tenemos con Estados Unidos el reto de la diversificación”, señala Meade, “es necesario profundizar los circuitos del diálogo para evitar el riesgo de una relación monotemática”. Es decir, no sólo se trabaja en aspectos de seguridad; también se hace, de manera intensa en migración, asuntos económicos, educativos, tecnológicos, de innovación… “cada diálogo corre en su propio carril, lo que minimiza la posibilidad de que asuntos irritantes en un tema impidan la fluidez general de una relación fundamental, por la pertenencia a un área geográfica y económica común”.
México tiene 75 embajadas y 55 consulados: 50 de estos se encuentran en Estados Unidos, lo cual nos debe dar una idea del peso del trabajo consular dentro de Relaciones Exteriores, que “no tiene paralelo en el mundo”.
El secretario de Relaciones Exteriores habló de gira de trabajo a Líbano que está por realizar.
¿Cuáles son los motivos y las expectativas de ese viaje?
Hay una pertenencia cultural, dice. Pocas diásporas son tan importantes para México como la libanesa. Hay más de medio millón de mexicanos de origen libanés. Eso implica una relación entrañable, que amerita profundizar el diálogo y el marco jurídico con el Líbano.
Comenta que el canciller libanés ya visitó México, que es el país con el que ellos inician sus actividades con sus diásporas. “Es el primero en importancia, en afecto y en potencial”.
¿Podría este acercamiento con Líbano extenderse a otras naciones del Oriente Medio?
Hay acercamientos con Arabia Saudita, una nación con la que hay poca relación (“México está subrepresentado”) y en la que nuestro país puede ser útil para la diversificación económica que los árabes están buscando. También con Turquía, que tiene muchas semejanzas con nosotros —un PIB per cápita similar, una estructura económica parecida, el hecho de ser un gozne entre distintas regiones del mundo— y que además es parte del G-20.
¿Qué opina el canciller de la imagen que tiene México ante el mundo? ¿No cree que está deteriorada?
La imagen no es un ejercicio de relaciones públicas. Se construye con lo que México hace y con lo que México es. En el mundo la gente “reconoce que México tiene un reto de violencia” y que “lo que tenemos que acreditar es que tenemos resultados positivos en el combate a esa violencia”.
Subraya las fuerzas del país: “Habría pocos diálogos que se pudieran tener si México no fuera apreciado, como lo es en el marco del G-20”. Añade: “Estamos creciendo, nos ubican como un país que está por despegar, regresamos al top ten del turismo mundial. En fin, se aprecian los despliegues que México está teniendo en distintos ámbitos”.
Entrevista completa: Crónica