La selección mexicana sub-17 ganó al equipo de Panamá, para así pasar a la siguiente fase del campeonato mundial de la categoría, donde se medirá en cuartos de final contra Francia.
Todo parecía empezar mal para el equipo mexicano por la copiosa lluvia que ha invadido al centro del país. Las canchas de futbol donde se iban a realizar entrenamientos previos al partido habían quedado inhabilitadas por las inundaciones. Por ello los organizadores tuvieron que analizar las condiciones del terreno para dar su visto bueno. El encuentro, a pesar de las adversidades, se pudo llevar a cabo.
El partido empezó con un gol tempranero del equipo mexicano, que en el minuto 2 tuvo la oportunidad de cobrar un tiro de esquina por conducto de Julio Gómez, cuyo pase no desaprovechó el jugador Carlos Fierro. El mexicano se levantó ante el primer poste y rozó el balón para incrustarlo justo entre las piernas del guardameta panameño.
México le ganó a Panamá 2-0. El partido se jugó en el Estadio Hidalgo, sede del equipo Pachuca.
Al llegar el gol, también lo hizo la gente, que pudo acercarse al Estadio Hidalgo después de haber bajado la intensidad de la lluvia. Aunque el gol dio una ventaja a los mexicanos, éstos no disminuyeron su intensidad, sin embargo, los panameños también se lanzaron al frente, de tal modo importunaron en algunas ocasiones al portero mexicano, Richard Sánchez. Con estos embates entre ambos adversarios terminó el primer tiempo.
Para el segundo lapso el equipo mexicano salió otra vez conectado con un buen ritmo de juego, y aunque los gritos de “Ole” y el “Cielito lindo” alentaban a los jugadores locales, la ventaja no se podía incrementar. Fue hasta el minuto 89, con un equipo panameño ya cansado que, de nuevo, Julio Gómez cobró buen un tiro de esquina, que ahora aprovechó Marco Bueno para rematar también de cabeza. Con esta ventaja de último minuto, el partido estaba prácticamente finiquitado, y así fue.
Fuente: Excelsior
Foto: Starmedia