El programa ‘The X Factor‘ en su versión inglesa, tuvo una invitada especial esta semana: Lady Gaga. Como era de esperarse, la neoyorquina causó gran polémica en us presentación en vivo.
La cantante de 25 años interpretó su nuevo sencillo, ‘Marry the Night‘; para la primera parte del show, Gaga cantó desde un confesionario, para después salir en uno de sus extravagantes atuendos, mientras cantaba frente a un gran crucifijo.
¿Confesionario? ¿Crucifijo? ¿Vestuarios extravagantes que rayan en lo incómodo? ¿No lo había hecho alguien antes? Ah sí… Madonna.
Mientras se acercaba a la cámara, se volvió más claro de qué se trataba su vestuario: un cuerpo decapitado, en el que parecía que Lady Gaga cargaba su propia cabeza.
Aún cuando acabó la canción, seguía “cargando” con su propia cabeza, lo que hizo que el presentador Dermot O’Leary se sintiera muy incómodo al entrevistarla.
Fuente: Daily Mail
