¡Los esfuerzos no fueron suficientes! Desafortunadamente es un hecho que la vaquita marina se extinguirá. Así lo anunció la CONABIO que es la Comisión Nacional para el Conocimiento del Uso de la Biodiversidad.
En palabras de su coordinador, José Sarukhán Kermez quien fue el encargado del proyecto para salvaguardar a la vaquita y proteger su hábitat, aseveró que la ayuda dentro de la región fue escaza, situación que complicó salvar al animalito de la extinción.
Pero ¿Quiénes son los principales responsables de este desastre? El especialista señala varios puntos a considerar. El primero fue la falta de conocimiento en el desarrollo de investigaciones especializadas para su conservación, debido a que se conoce poco de la especie.
Otro responsable de esta hecatombe ambiental fue la indiferencia de pasadas administraciones por esta problemática. Pero el factor más determinante fue la pesca ilegal perpetuada por el crimen organizado y la pesca local hacia la totoaba, alimento principal de la vaquita marina y por supuesto porque muchas de ellas quedaban atrapadas en las redes porque los pescadores no respetaban las áreas protegidas.
De tal manera que su desaparición es inminente y hoy solo contamos con 30 ejemplares vivos. Ni siquiera el intento de reubicarlas en otros espacios marinos fue bueno, ya que los ejemplares que fueron trasladados perecieron.
Solo queda una pequeña luz de esperanza, si alguno de los animalitos restantes se llegara a adaptar y sobrevivir el traslado a otro espacio, pero nuevamente el panorama no es muy alentador.