En Nueva Zelanda, dos niños fueron corridos a escobazos por la dueña de una tienda a la cual intentaron robar usando un rifle de juguete.
Los chicos tienen 12 y 15 años y mostraron tanto nerviosísmo, que la mujer se defendió con una escoba hasta correrlos.
Los adolescentes fueron detenidos y se encontraban bajo los efectos del alcohol y las metanfetaminas.