Abby Beckley es una mujer que en agosto del 2016 descubrió la presencia de algo extraño dentro de su ojo izquierdo, esto después de que durante casi una semana sufriera irritación en la retina y dolores de cabeza, hasta que un día mirándose al espejo, con un dedo bajo la parte inferior del ojo notó que algo se movía, y con otro dejo hizo un movimiento para descubrir lo que nunca imaginó: un gusano.
Tras investigar en Internet y descubrir que no había casos similares al suyo, acudió con un especialista de la Universidad de Ciencias de la Salud de Oregon, quienes en un inicio no encontraron ningún gusano, hasta que después de media hora volvió a sentir un cosquilleo y fue cuando pudieron retirar uno de estos animales, que fue enviado a CDC, donde después de analizarlo determinaron que el parásito pertenece a la especie de Thezalia gulosa, larva que la mosca de la fruta deposita en los ojos de animales como perros, gatos y otros mamíferos.
Cabe destacar que por primera vez en dos décadas se presenta un caso como este en un humano, en Estados Unidos, incluso médicos de este país establecen que solo se han registrado 11 casos de personas que han sido infectadas por gusanos en los ojos, pero ninguno de este tipo.
Los síntomas por la presencia de este tipo de gusanos pueden ser: hinchazón de párpados, conjuntivitis y secreciones mucosas o lagañas.