El mexicano Antonio Margarito buscará repetir el triunfo de aquel 2008 por nocaut ante el puertorriqueño Miguel Cotto, en combate por el título Superwelter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), en el Madison Square Garden.
A primera vista, es una revancha de rutina. Pero la segunda parte de Cotto-Margarito no cabe en esa categoría: este es un combate rodeado de circunstancias que le han convertido en una especie de rencilla personal.
Margarito propinó a Cotto su primera derrota en el boxeo profesional en julio del 2008, en la Arena Garden del hotel MGM de Las Vegas, Nevada.
El mexicano lució imponente y sacudió al boricua a placer, para imponerse por nocaut en el round 11 y arrebatarle el cinturón Welter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
Cotto aceptó su derrota “como un hombre”, pero no ha perdido la oportunidad para denigrar a su oponente mexicano.
Para Cotto, Margarito es un “criminal por usar un arma en contra de otro” y una “vergüenza para el mundo del boxeo y para México”.
El puertorriqueño está convencido que Margarito hizo trampa en 2008, una sospecha que fundamenta en que el ex entrenador de Margarito, Javier Capetillo, fue sorprendido tratando de ponerle yeso a los guantes del mexicano previo a una pelea que perdió posteriormente ante Shane Mosley.
El razonamiento de Cotto es sencillo: si Margarito hizo trampa entonces, pues debió hacerlo antes.
Margarito no se inmuta por las acusaciones y se burla del trato despectivo de Cotto.
“No sé porque anda diciendo que soy un criminal o una mala persona. Yo no ando por ahí pegándole a mi familia”, contestó Margarito, al recordar el conflicto que provocó el cisma de la relación de Cotto con Evangelista, su tío y ex entrenador.
“Habla porque es lo que único que sabe hacer. Habla porque tiene boca no más”, añadió.
El boricua está dolido y busca venganza, pues el mexicano le propinó su primera derrota profesional.
Cotto se siente como en casa en Nueva York, donde tiene una gran legión de fans: “Pelear en Nueva York siempre ha sido muy especial para mí, pues la gente siempre ha apoyado y quiero dar otra gran pelea y una victoria más para recordar”.
Será la novena pelea de Cotto (36-2; 29 KO’s) en Nueva York y séptima en el Madison Square Garden.
Tony sufrió una fractura en la órbita del ojo en la paliza que le propinó Manny Pacquiao en noviembre del año pasado.
Muchos consideran que Margarito está arriesgando su físico, inclusive su vida, al exponer su ojo.
El mexicano se ríe: “Cotto le puede pegar con todo a mi ojo. No me va a hacer nada. Su pegada es de una niña. Mi cuñado pega más fuerte y es un peso mosca”.
Cotto insiste que no saldrá sólo a castigar el ojo de Margarito: “Nos entrenamos para todo, nada específico. Sabemos y entendemos que si algo ocurre durante la pelea y tenemos alguna ventaja, vamos a aprovechar”.
También se expresó perplejo que Margarito haya querido pelear con el riesgo de un daño más severo en el ojo.
“Mi salud es lo primero”, señaló Cotto. “Jamás en la vida seré marioneta de nadie para exponer mi salud”, dijo el boricua, quien fue noqueado en 12 rounds por Manny Pacquiao en noviembre de 2009.
Fuente: Fox Sports
