El candidato del PRD a la Presidencia de la República sabe que el plantón de Reforma y el Zócalo son acciones del pasado que están en la cuenta pendiente que tiene con los ciudadanos. Por esa razón argumenta que de no haber tomado esa acción, “la violencia se hubiera desbordado y hubiera habido hasta muertos”.
En su mensaje semanal vía internet, explicó que aunque les ha costado mucho (políticamente) se tuvo que tomar esta decisión para evitar la violencia.
“El plantón de Reforma y del Zócalo se hizo precisamente para evitar la violencia, nos costó mucho, nos han cuestionado mucho por eso, pero hay que decirles que si no hubiéramos tomado esa decisión hubiesen habido muertos”, expresó.
López Obrador intenta convencer, principalmente a los capitalinos, de que el haber cerrado Reforma y tomado el Zócalo era “necesario”. Lo que está lejos de la realidad, ya que no tan solo afecto a los ciudadanos que se mueven en la zona sino a los comerciantes que vieron afectadas sus ventas y en muchos casos se vieron obligados a cerrar durante los más de 60 días que permaneció el llamado “Plantón de Reforma”.
