Regiones del cerebro relacionadas con la memoria, el sentido del yo, la empatía y el estrés fueron parte de los cambios que generó un programa de meditación de atención y conciencia plena que se realizó durante ocho semanas (27 minutos diarios), según un estudio realizado por científicos del Massachusetts General Hospital (MGH) de Estados Unidos.
La investigación en la que participaron 16 personas señala que la meditación sí genera cambios en la materia gris del cerebro, más allá de la paz interior y la relajación física con las que se le relacionaba.
“Tras llevar a cabo sesiones de meditación los participantes se sentían mejor no sólo por pasar algunos minutos relajados, sino que su cerebro reaccionaba positivamente ante ello”, refirió Sara Lazar, quien estuvo a cargo del estudio.
Además, las personas que la practican han afirmado que esta práctica puede propiciar además beneficios cognitivos y psicológicos persistentes.
Sobre este mismo tema, un grupo de doce monjes tibetanos participará en la exposición “Brain: The Inside Story”, presentada en el Museo de Historia Natural de Nueva York, en donde intentarán demostrar lo efectos físicos que tiene la meditación sobre el cerebro humano.
A través de un comunicado, el museo neoyorkino afirmó que la meta de la meditación es controlar la mente para hacerla más pacífica, centrada y consiente.