Momentos gloriosos y otros desastrosos han formado parte de los Juegos Olímpicos de Rio 2016. Aunque son más los buenos que malos, dos clavadistas seguro serán recordados más por su desastrosa participación que por otra cosa.
El primer caso fue del malayo Azman Ahmad Amsyar, quien había realizado 5 clavados buenos, con los que parecía que iba a clasificar, pero el número 6 fue tan malo que ya no pudo continuar en la competencia. Tenía un puntaje de 9,75 sobre 100 posibles, pero acabó en el último lugar de la tabla.
La rusa Nadezhda Bazhina saltó mal desde el trampolín, se fue chueco y cayó de espalda al agua, por lo que recibió un 0 de calificación, lo peor que se ha registrado en Rio 2016.