Desde ayer, los candidatos a gobernador del Estado de México, tuvieron su primer cierre de campaña. En ellos, los candidatos reforzaron lo que han hecho a lo largo de los 42 días de campaña a lo largo y ancho del estado.
Eruviel Ávila inició con un evento masivo en el centro de Toluca. Miles de personas se congregaron para verlo, y, al igual que en sus eventos previos de campaña, fue un magno evento en el que había color (rojo, por supuesto), música, gritos y porras. Para el primer cierre de Eruviel, estuvieron presentes 10 gobernadores priístas – Enrique Peña Nieto no estaba incluído entre ellos.
“Gracias a todos los mexiquenses que han pensado en grande”, dijo Eruviel en su discurso, en el que también los invitó a no confiarse y seguir trabajando de aquí al 3 de julio.
Luis Felipe Bravo Mena hizo lo propio en Los Reyes, aunque en un evento mucho más pequeño. Ahí aseguró que él será el próximo gobernador del Estado de México y que el PRD “está desesperado por votos, por eso vienen tras los del PAN”.
Alejandro Encinas lo hizo en Valle de Chalco, donde estuvo acompañado por Marcelo Ebrard – quien canceló su asistencia a la marcha del orgullo gay en la Ciudad de México por asistir a este evento – y el presidente del PRD Jesús Zambrano. Tanto Cuahutémoc como Lázaro Cárdenas rechazaron la invitación para asistir.
En ningún medio se especificó el número de asistentes; se limitaba a decir “miles”, sin que ninguno diera la cifra exacta.
Una vez más, Zambrano desestimó todas las encuestas que colocan a Encinas 30 puntos abajo de Eruviel, diciendo que el candidato de su partido está “muy cerca” del candidato del PRI.
Con estos tres eventos, queda muy claro que los tres candidatos acaban como empezaron: Eruviel, con una enorme ventaja y apoyo en el Estado de México; Bravo Mena, deslucido y con el apoyo de su partido solamente de palabra; y Encinas, rechazando cualquier afirmación de que perderá la elección.
