La modelo de origen danés, Ulrikke Hoyer, denunció en su cuenta de Instagram haber sido despedida un día antes del desfile de Louis Vuitton, realizado en Japón, después de realizar la prueba de vestuario.
A pesar de que Hoyer ha desfilado para firmas como Stella McCartney, Chloé, Erdem y Giambattista Valli, y ha colaborado con revistas de estilo como Dazed & Confused Magazine y Vogue, de acuerdo con lo compartido, la directora de casting de Ashley Brokaw le pidió que bebiera únicamente agua durante las siguientes 24 horas y amenazó que, de no hacerlo, no subiría a la pasarela.
Éstas son parte de sus declaraciones:
“Me prohibieron ir al evento por ser ‘demasiado gorda’ (uso una talla 34-36). Alexia, la encargada de casting de Ashley Brokaw, dijo que tuve algunos problemas durante el ‘fitting’.
Según ella tenía ‘un estómago muy hinchado’ y ‘cara hinchada’, y me instó a morirme de hambre diciendo: ‘Ulrikke necesita beber sólo agua las próximas 24 horas’. Me quedé en shock cuando lo escuché.
Desperté a las 2 de la mañana y estaba muy hambrienta. El desayuno empezó a las 6:30 am (comí lo mínimo). Tenía miedo de encontrarme con Alexia pero por suerte no apareció hasta las 8, cuando ya se habían llevado mi plato de la mesa.
Nos dio los buenos días y me miró, después miró hacia la mesa, ya no había ningún plato y me volvió a mirar. Estaba comprobando si había comido algo. A las 7 de la tarde mi agente en Dinamarca me llamó para darme la mala noticia de que Louis Vuitton había decidido cancelar mi participación en el desfile.
Afortunadamente tengo 20 años (…) y no soy una chica de 15, que son nuevas en esto y se sienten inseguras sobre sí mismas”.
Hasta el momento ni la agencia de casting de Ashley Brokaw ni la firma, Louis Vuitton, han declarado al respecto.
Con información de SDP Noticias