Los legisladores de la Cámara de Representantes se oponen a la medida arancelaria del acero y aluminio que será anunciada este jueves.
Más de 100 republicanos de la Cámara de Representantes firmaron una carta dirigida a la Casa Blanca, en la que se oponen a la medida arancelaraia del presidente Donald Trump, de acuerdo con el Wall Street Journal.
El representante Kevin Brady, presidente del Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes, dijo que la carta apunta a presionar a Trump para que “reconsidere la idea de aranceles amplios con muchas consecuencias negativas involuntarias”.
Si Trump impone aranceles al acero y el aluminio, las industrias de los estados que lo llevaron a la Casa Blanca podrían verse severamente afectadas.
Las plantas de automóviles desde Michigan hasta Carolina del Sur pueden pagar más por el acero utilizado para fabricar motores y piezas de automóviles.
Las acciones de represalia de la Unión Europea podrían dañar las destilerías de bourbon en Kentucky y a los trabajadores de la fábrica Harley-Davidson en Wisconsin.
Los agricultores de todo el Medio Oeste serían un blanco principal para China, el mayor comprador de algunos cultivos estadounidenses.
Trump dijo la semana pasada que planea imponer un arancel, o impuesto, del 25% sobre el acero importado, y un arancel del 10% sobre el aluminio importado.