El Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, afirmó que México y China empiezan una nueva etapa en la relación empresarial, más estrecha y al más alto nivel, que permitirá transitar de un escenario de competencia hacia uno de complementariedad.
“Alcanzar mayor equilibrio en balanza comercial y detonar mayores inversiones de China en México, es prioridad para mi Gobierno”, dijo.
Ante empresarios de ambos países, el mandatario mexicano planteó que para enfrentar esta nueva etapa se tienen dos retos:
1. Lograr equilibrio entre importaciones y exportaciones entre las dos naciones.
2. Concretar posibilidades de inversión en la relación bilateral.
Peña Nieto confío en que esta fase entre México y China se materializará gracias a la voluntad política y el ánimo renovado que han demostrado ambos gobiernos.
El jefe del Ejecutivo indicó que México es hoy, un destino serio, confiable y atractivo para invertir y subrayó que el país ve en su apertura al mundo, una plataforma para impulsar su crecimiento económico y acelerar su desarrollo social.
El mandatario dijo que gran parte de las oportunidades económicas estarán en región Asia-Pacífico, donde China tiene gran relevancia.
