El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) informó que los seis indicadores que miden la pobreza disminuyeron por la efectiva utilización de los programas sociales de los tres órdenes de gobierno y además que aumentó el ingreso laboral por la estabilidad de las tasas de inflación, lo que se vio reflejado en el incremento del poder adquisitivo de los trabajadores.
En el Informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social 2016 se detalla que las seis líneas con las que se mide la pobreza disminuyeron significativamente de 2010 a 2015.
Por su parte el rezago educativo pasó de 20.7 a 17.9 por ciento. Además 87 mil personas dejaron la condición de pobreza extrema, al pasar de 9.8 a 9.5 por ciento.
Lo anterior se logró gracias a la coordinación de estrategias de política social de los tres niveles de gobierno, “aún entre administraciones de partidos políticos distintos”.
Sin embargo, el Coneval aceptó que “diversos grupos vulnerables siguen necesitando políticas públicas más amplias que consideren sus particularidades y puedan contar con oportunidades económicas, políticas y sociales similares a la de otros sectores que han tenido históricamente mayores beneficios”.
En 2014, siete de cada 10 indígenas se encontraban en pobreza, de los cuales tres se encontraban en pobreza extrema. El rezago educativo entre las personas de la tercera edad sigue siendo significativo, pues en la población menor de 65 años el rezago fue de 15.2 por ciento y entre los adultos mayores fue de 60.7 por ciento.
El Coneval reconoció que la Sedesol ha generado información para relacionar mejor los apoyos que se otorgan con la población que los recibe. Sin embargo, dijo, se requiere de la construcción efectiva y transparente de padrones y sistemas de información que promuevan la acción pública.