Ocurrente, carismático y con un buen humor que sorprendió a los mexicanos fué como empezó Michael Bublé el primero de sus dos conciertos en el Auditorio Nacional de la ciudad de México.
“Mexico City, ¿cómo están chilangos? Mi nombre es Miguel Burbuja”. fué el comentario que hizo estallar en una carcajada a las 10 mil almas que llenaron el coloso de Reforma.
Con un look impecable hacía gritar a las mujeres con cada interpretación y arrancar el aplauso de todos los caballeros cada que bromeaba, logrando el total control de la audiencia por un espacio de poco más de dos horas.
Temas como “Entertainer” “Showman”, “I’ve Got the World on a String” y “Don’t Stop Believin” de Journey hicieron vibrar al público.
Para finalizar con su ya característico a capella, dejó a muchos anonadados ya que se podía escuchar su potente voz con claridad sin necesidad de ningún tipo de micrófono.
Hoy se presenta por última vez dejando satisfechos a sus fans mexicanos pero como siempre con ganas de más.
