La activista Anna Dovgaliuk, de San Petersburgo, Rusia, se manifestó en el metro en contra del ‘Manspreading’, una práctica que hacen los hombres, en la que abren sus piernas en los asientos del transporte público, hasta ocupar el asiento del otro pasajero.
La joven decidió echar una solución de agua con legía en las piernas de los hombres que iban sentados de esta manera, para ser más precisos, y de acuerdo con el texto del video que compartió Dovgaliuk, fueron cerca de 70.
En redes sociales, los hombres comentaron indignados e incluso explicaron que el abrir las piernas al sentarse es por razones fisiológicas, y algunos llegaron a amenazar a la activista:
https://youtu.be/NCZOw05L7JA