Sandra Rawline, gerente de 52 años en el Capitol Title of Texas, alega haber sido despedida de su trabajo por no cumplir con la petición de su jefe de teñir su pelo gris y usar ropa y accesorios que la hicieran lucir más joven.
Estos sucesos ocurridos en el 2009 han llevado a Rawline a levantar una demanda por discriminación ante la Corte Federal del Distrito de Houston.
Rawline, quien ha tenido canas desde joven, recibió premios por su excelencia laboral en el 2005 y el 2006, e incluso fue promovida en el 2008, el año anterior a su despido. Al parecer, fue reemplazada por una mujer 10 años más joven una semana después de que se negara a cumplir con la petición de su jefe de adoptar un aspecto más juvenil.
El Capitol Title of Texas afirmó en un comunicado no haber despedido a Rawline por su apariencia, sino más bien tratarse de una situación en la que ya no había trabajo para ella.
Fuente: styleITE
