A un joven ladrón de 32 años le salió el tiro por la culata cuando fue abusado sexualmente por Olga, una mujer a quien intentó asaltar.
La joven de 28 años trabajaba en una estética, en la región Kaluga, Rusia. Anteriormente, la habían intentado asaltar en tres ocasiones diferentes y las autoridades no respondían como deberían.
El colmo fue cuando el ladrón se atrevió a robarle a Olga en su local. Llegó al salón de belleza y le pidió todo el dinero de la caja registradora. La mujer enojada hizo justicia a mano propia y tomó una plancha para el cabello para golpearlo y dejarlo inconsciente.
En el suelo, mientras sus clientes veían el espectáculo, Olga lo amarró de los pies con el cable de la secadora para arrastrarlo al sótano.
Ahí lo mantuvo por 48 horas, le dio pastillas de viagra y lo obligó a tener relaciones con ella varias veces. Luego dos días abusando de él, lo dejó en libertad.
Después, la mujer asistió a las autoridades para levantar una denuncia en contra del hombre, pero para su sorpresa, el ladrón fue primero a levantar cargos por abuso sexual y secuestro.
Así que la policía arrestó a Olga, quien aseguró que al final de todo, le dio 26 dólares, ropa y alimento.