Julián Hernández tenía cinco años cuando desapareció en 2002 en Alabama, Estados Unidos.
Ahora, 13 años después, Julián acaba de ser encontrado vivo a unos 1.000 km de Alabama, en Ohio.
La policía confirmó que el ahora joven de 18 años está sano y salvo.
Según informan los medios locales, su madre -que había reportado la desaparición hace 13 años- está “eufórica” con la noticia.
El día que Julián desapareció, su padre, Bobby Hernández, debía llevarlo al preescolar pero en lugar de ello retiró dinero de su cuenta bancaria y huyó.
Desde entonces Julián había estado viviendo con su padre, una mujer y otros dos niños.
Boby Hernandez, de 53 años, fue arrestado y está detenido en una cárcel en Ohio, informaron las autoridades.
El hallazgo del joven se produjo por casualidad.
El 30 de octubre el FBI recibió un aviso de que el adolescente que ahora vivía en Ohio podría ser el niño que desapareció hace 13 años.
Julián estaba teniendo problemas con su número de Seguro Social cuando estaba llenando su soliticud de inscripción a la universidad y buscó la ayuda de un consejero escolar.
Su número de Seguro Social no coincidía con su nombre y cuando el consejero lo estaba ayudando para descubrir la causa, descubrió que el joven estaba registrado como desaparecido por el Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados, CNNDE.
El organismo comenzó a trabajar con la policía de Alabama para confirmar la identidad del joven y descubrieron que, en efecto, era el niño que desapareció en 2002.
Fuente: BBC Mundo
