Mathilde Broberg vive en Aarhus, Dinamarca y hace un par de años no pudo subir a juego mecánico debido a su sobrepeso –en ese momento pesaba 126 kilos-, esta situación la marcó tanto que decidió darle un giro a su vida y perder 60 kilos en tres años.
Para la danesa el sobrepeso significó varios problemas de salud, pues no podía respirar bien, se cansaba rápido y con actividades cotidianas, además de no poder saciar su hambre con nada, situación que la llevó a ingerir cerca de 3,500 calorías diarias, que es el doble del consumo normal en una mujer con el tipo de cuerpo y estatura de Mathilde.
La chica se sometió a una reducción de estómago para poder sentirse satisfecha con menos alimentos. Además, y lo que más ha impactado en la red, es que empezó a comer todo con una cuchara de café, así se obligaba a disfrutar cada bocado, centrarse en lo que estaba comiendo, evitar comer de más y evitar la ansiedad que provocaba su hambre.
“Empecé a comer con una cuchara pequeña en lugar de una cuchara de mesa, de esa manera me sentía llena más rápido. Además, sólo ingería raciones que nunca fueran más grandes que mi mano“, reveló la Mathilde a un medio británico.
Después del gran esfuerzo y disciplina, Broberg logró perder más de la mitad de su peso, ahora es entrenadora personal y también, firmó un contrato como modelo de ropa deportiva
“Si hace tres años me llegan a decir cómo iba a estar ahora, jamás me lo hubiera creído”, expresó la chica danesa.