No tengo ninguna dosis de cinismo: Beatriz Paredes

Entrevistada por Fernando del Collado en Tragaluz, de Milenio TV, la aspirante al Gobierno del Distrito Federal asegura que tiene posibilidades de ganar. Con respuestas breves y directas, enmarcadas con referencias a la poesía, la priista niega algún acuerdo con Andrés Manuel López Obrador o cualquier compra de votos. No se vaya a pensar otra cosa, pero es la Beatriz que todos llevamos dentro.

-Qué gusto verla de vuelta, doña Beatriz.

-Me da mucho gusto a mí también.

-Hay que ser valientes, ¿no?

-Siempre hay que ser valientes.

-¿O hay que ponerse los pantalones como nos invita Cordero?

-Hay gente que anda en shorts y es muy valiente. No tiene que ver con el tipo de ropa la valentía.

-Detengámonos en una línea de un extenso poema en el que llama a erradicar el “oportunismo y las concesiones”.

-Forma parte de una convocatoria. Es un poema dedicado a las mujeres de América Latina.

-Tomando el poema, ¿puedo dejar el miedo y preguntarle si no es usted cínica?

-En qué escuela quiere usar la palabra cinismo. Los cínicos, según los griegos, tenían algunas características. Los cínicos en la etapa contemporánea tienen una connotación peyorativa. No tengo ninguna dosis de cinismo.

-Y en México, ¿cómo son?

-¿Los cínicos? Pues habría que preguntárselo a quien sea cínico. Yo no lo soy, entonces no sé qué aportar.

-¿Congruente?

-Lo intento.

-Le puedo igual preguntar, ¿qué le hace pensar que a los capitalinos nos compran con esas ocurrencias?

-Yo creo que los capitalinos no se venden. ¿Usted cree que se venden?

-¿Qué le hace pensar que sí ganará?

-En este momento soy una ciudadana más que estoy intentando tener una candidatura en los tiempos electorales.

-¿No le bastó perder la primera vez?

A mí nunca me ha bastado perder, ni me ha bastado ganar. Compito para construir y aportar. Ése es el sentido de la competencia en la política.

-¿A poco los priistas de esta ciudad la quieren?

-Pregúntaselo a los priistas que me quieren, hay otros que no me quieren tanto. Así es, uno nunca tiene la unanimidad.

-¿Es verdad que ya negoció con El Peje sobre la ciudad?

El Peje es un hombre, que yo sepa, que no negocia con nadie.

-¿No se han visto?

-Al Peje lo veo en los periódicos con mucho interés.

-Con las huestes de Arce y los verdes, ¿le basta?

Mire, no quisiera que se interpretara la entrevista como campaña. Por eso, usted comprenderá que soy muy parca y no expreso mi propuesta.

-¿Y cuánto calcula que costarían los votos?

¡Yo nunca he comprado votos!

-¿No es cuestión de dinero?

-No es mi impresión.

-¿Y en verdad la conocemos todos los capitalinos, doña Beatriz?

-No sé. Dicen las encuestas que me conoce 88% de los capitalinos y eso lo dicen unas 10 encuestas.

-¿Sabremos sus fortalezas?

-No lo sé.

-¿Sus debilidades?

-Probablemente ésas las va a subrayar gente muy interesada y muy aguda.

-Por ejemplo, ¿dónde vive?

-En San Angelín. Ahí tiene su casa.

-¿Con quién?

-Vivo sola con mi sobrino.

-¿Algo qué ocultar?

Como todos, tenemos claroscuros, zonas luminosas y zonas menos luminosas. Pero soy una mujer que puedo mirar de frente a quien sea.

-¿Es de confiar, doña Beatriz?

-Quienes me conocen dicen que sí.

-En el PRI, ¿su moral sigue siendo un árbol que da moras?

-En el PRI, los priistas tenemos ética pública.

-¿No pensará que la mujer mexicana vale tanto como un huipil?

-Perdóneme, usted habla mucho de precios. Yo no pienso la vida en costos ni en ventas.

-¿Un nuevo PRI, doña Beatriz?

Un PRI que corresponde a la realidad contemporánea y que tuvo la aptitud para convencer a la mayoría del electorado y de venir de tercera fuerza electoral a primera fuerza electoral.

-¿Quiere usted un puesto en el gabinete?

No me interesan los puestos, me importan las causas.

-Con esa fortaleza doña Beatriz, ¿por qué no se animó a la Presidencia?

-Como le digo, no me interesan los puestos, sino las causas.

-¿Es usted, en fin, una priista libre?

-Soy una persona libre. Soy una persona libre.

-En fin, qué gusto verla de regreso, doña Beatriz.

-¡Nunca he estado de salida!

Fuente: Milenio

Foto: TV Azteca