Barack Obama se reunió con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu en Washington después de su discurso sobre el mundo árabe.
Por primera vez, Obama llamó a una solución negociada al conflicto palestino-israelí basada en las fronteras de 1967.
Tras la conversación con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el mandatario norteamericano admitió tener “diferencias” con el estado de Israel.
Más adelante subrayo este como un momento tanto de oportunidades como de “peligros” para Medio Oriente.
De acuerdo con el mandatario, las “diferencias” entre Estados Unidos e Israel se deben al proceso de paz israel-palestino.
Fuente: Informador
