Operador político de Guillermo Anaya negocia con narco y crimen organizado

Siguen saliendo los trapitos al sol del candidato a gobernador del PAN en Coahuila, Guillermo Anaya. Resulta que uno de sus operadores y asesores políticos, Mario Noé Gordillo Rodríguez, fungía como “negociador” e interlocutor con los miembros del crímen organizado en el municipio de Múzquiz.

Esto se dio a conocer a través de un acta de cabildo de dicho municipio, donde se informa que Gordillo Rodríguez ya no se desempeñará como coordinador de directores de dicho ayuntamiento, sino que laborará como asesor personal del alcalde, encargado de “entrevistarse con otras personas para que no actúen mal”.

“Se tienen que hacer pláticas con estas personas, a través de el Lic. Mario Noé Gordillo Rodríguez, ya que como municipio no estamos preparados para enfrentarlo” se menciona en el acta.

El propio síndico del ayuntamiento (de administración panista) reconoce que en todos los ayuntamiento debe existir un negociador para hacer frente a un panorama en el que “los militares ya no son tan amigueros”.

Vaya fichitas de las que se rodea el candidato Guillermo Anaya, ¿así pensará conducir su gobierno en caso de ser electo? ¿dialogando y negociando con delincuentes?

Y por si esto fuera poco, salió a relucir una sospechosa “ganga” de la que disfrutó la esposa del señor Anaya. Resulta que en 2007, María Teresa Aguirre Gaitán, cónyuge del candidato, obtuvo un próspero rancho de alrededor de 5 000 hectáreas en la increíble suma de 4.5 millones de pesos.

Aseguran los vecinos que, por la extensión, condiciones y potencial del rancho, el precio por hectárea debería ser cercano a los 10 mil pesos, no los 853 que quedaron registrados en la transacción. Lo curioso es que no se trata de un simple golpe de suerte o una ganga, el rancho era propiedad de María del Carmen Fernández Ugarte, lideresa municipal del blanquiazul de Torreón y ex diputada suplente de Jorge Zermeño; además de ser la madre de Luis Fernando Salazar Fernández, coordinador de la campaña de Anaya en Coahuila y ex delegado de Sedesol.

¿No les parece sospechoso que dirigentes del partido le estén prácticamente regalando un rancho al candidato a gobernador? En mis tierras eso se llama soborno o intercambio de favores. Quién sabe a que clase de arreglo habrá llegado Guillermo Anaya con los ex propietario de dicho rancho.

Fuente: La Crónica y Terra.