Opinión y Análisis, 10 de noviembre

BAJO RESERVA

EL REPORTE que presentó Human Rights Watch, bajo el título Ni seguridad, ni derechos: ejecuciones y tortura en la guerra contra el narcotráfico en México, pega en el corazón de la estrategia anticrimen del presidente Felipe Calderón, al calificarla de un fracaso. Pero también hay un apartado muy crítico dedicado al Poder Judicial, que encabeza el ministro Juan Silva Meza: los jueces no deben esperar a la implantación plena de la reforma penal para actuar contra los abusos “más generalizados”, como admitir pruebas obtenidas bajo coerción y tortura. El reporte presentado por el director para América de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, considera que estas dos prácticas representan “incentivos perversos” para policías y soldados. (El Universal)

JULIO ASTILLERO

Olimpiadas del terror durante cinco años son las que ha vivido el pueblo mexicano y de ello dan cuenta múltiples instancias internacionales, en distintos tonos y con diversos datos pero coincidentes todas en que durante el calderonato se han logrado marcas históricas en diversas disciplinas del crimen institucionalizado. Sí se puede, ha sido la consigna de empuje que se han aplicado a sí mismas las fuerzas policiales, militares y marinas que en estos años han conseguido lo inimaginable, en un constante reto de progresión escalofriante. Medallas de oro en las más variadas contiendas descalificatorias, primeros lugares en descomposición nacional, subidas al podio de lo inhumano, preseas en desaparición o mal gasto de presupuesto federal por equipos, maratones de corrupción bien ganados, clavados espectaculares en el erario, justicia de un lado a otro mediante raqueta y deportes de fuerza practicados con ánimo de limpieza social. (La Jornada)

CIRO GÓMEZ LEYVA

El informe, titulado “Ni derechos ni seguridad (asesinato, tortura y desapariciones en la guerra de las drogas)”, es sólido, estruja. No me detengo en la estadística, bien articulada, de las 39 desapariciones “en las cuales existen pruebas contundentes de que habrían participado las fuerzas de seguridad”. O en las 24 ejecuciones extrajudiciales con “pruebas creíbles”. Lo medular, pienso, está en la investigación que deja ver cómo los familiares de los desaparecidos son objeto de tratos “particularmente crueles”, y que pone luz sobre la inoperancia, si no es que futilidad, de las comisiones de derechos humanos. Y, desde luego, en la documentación de que la mayoría de las víctimas han sido jóvenes de origen humilde. Un documento así vuelve muy difícil rebatir la que quizá sea la frase política esencial de las 214 páginas. (Milenio Diario)

PEPE GRILLO

Marcelo Ebrard, el mejor alcalde del mundo, según algún organismo europeo, no hace honor al titulito. Los pilotos y azafatas de Mexicana lo vivieron ayer. Ebrard deja a sus aliados tomar calles y edificios por semanas y meses, y echó con violencia a los pilotos a 9 minutos de reunirse. A golpes los subieron a camionetas para llevarlos a calabozos. Qué grave que la justicia del DF sea para los aplaudidores; y a señoras y empleados que se quejan los retira a golpes. (La Crónica de Hoy)

PABLO HIRIART

La entrevista que le hizo Javier Alatorre a López Obrador es una joya que confirma el perfil del personaje y sirve para desengañar a quienes promovieron una reforma para contentarlo. —¿Confías en el IFE? —le preguntó el conductor del noticiero Hechos, en Azteca 13. —No. Yo confío en la gente para defender el voto. Más claro, ni el agua. Las instituciones, al diablo. Ahora va a ocurrir lo mismo, pues sólo hay una forma de que López Obrador respete un resultado electoral: que gane o le den el triunfo. Sobre aviso no hay engaño. La única incógnita para julio próximo es con quién va a hacer pareja AMLO en las movilizaciones para anular las elecciones. ¿Va a ir del brazo del PAN si es que gana el PRI? ¿O va a ir con el PRI si es que repite el PAN? (La Razón de México