Óscar Jaenada, el nuevo Cantinflas

La película Cantinflas ya tiene fecha de estreno. El próximo 29 de agosto en Estados Unidos está previsto que se estrene la cinta sobre el legendario actor y comediante mexicano estelarizada por el actor español Óscar Jaenada y bajo la dirección del cineasta mexicano Sebastián del Amo con la producción de la casa productora Pantelion Films.

El comediante y actor mexicano Cantinflas es, sin duda, el máximo exponente de la comedia en su país gracias al arte mayor de sus circunloquios infinitos y en los que, con frecuencia, hacía una agudísima e inteligente sátira social que desarmaba a cualquier oponente en cintas ya clásicas de su país, por decir algunas de las más significativas, Ahí está el detalle (1940), El Gendarme Desconocido (1941), Los Tres Mosqueteros (1942), El Circo (1943), A Volar Joven (1947), El Mago (1949), Si Yo Fuera Diputado (1952) yEl Señor Fotógrafo (1953).

El personaje de Cantinflas, según lo contó el mismo Moreno Reyes, surgió en el Teatro Carpa Mayab, un teatro de barrio en donde el público manifestaba su desagrado ante un artista bajándolo del escenario a golpes.

En ese escenario bravo Cantinflas se curtió como comediante merced a ese personaje pícaro, que sobrevive a duras y penas, siempre huyendo de la ley, y que en cierto sentido es una representación mestiza, urbana y mexicana del personaje picaresco de la literatura española, El Lazarillo de Tormes (Autor anónimo, 1554).

Moreno Reyes (Ciudad de México, 1911-1993) contaba que en aquel teatro popular e intimidado por el pánico escénico olvidó su monólogo original y así comenzó a decir lo primero que se le venía a la mente en un caos de palabras y frases y lo que salió fue pura magia verbal. Los asistentes lo atacan, aunque se carcajean, y él cayó en cuenta entonces que había encontrado un filón de oro de la comicidad: el caos lingüístico como una de las bellas artes.

Cantinflas, antes de ser un ídolo de masas y como miembro de una familia humilde encabezada por un cartero del populoso barrio Santa María la Redonda, desempeñó varios oficios y artes. Primero se inscribió en la escuela de Medicina pero debido a las necesidades económicas de su familia abandonó los estudios para actuar como bailarín, imitador y luego incursionar en el boxeo profesional (lo que le dió posteriormente material para excelentes gags) y más tarde trabajar en un circo.

Esos oficios, y sus años en las carpas, son esenciales para entender la fenomenología de Cantinflas.