¿Padeces de Síndrome de Peter Pan?

Si tienes más de 30 años, estás pegándole a los 40 o pasas de los 50 y sigues eludiendo responsabilidades de todo tipo es muy probable que tengas el Síndrome de Peter Pan.

Son adultos que continúan comportándose como niños o adolescentes y no son capaces de tomar la responsabilidad de sus actos. Son personas que se niegan a crecer presentando una marcada inmadurez emocional matizada por una fuerte inseguridad y un gran temor a no ser queridos y aceptados.

La primera vez que se relacionó el nombre de Peter Pan con un problema emocional fue en el año 1966, cuando el psiquiatra Eric Berne lo utilizó para indicar al niño que todo adulto lleva dentro y que sólo se preocupa por satisfacer sus propias necesidades.

¿Cuáles son sus síntomas principales?

1. Aunque los adultos han llegado a la treintena o incluso rondan la cuarentena de años continúan comportándose como niños pequeños. Usualmente estas personas parecen ser seguras de si mismas e incluso arrogantes; sin embargo, esto es solo una coraza para ocultar sus verdaderas inseguridades e indecisiones.

2. Usan excusas o mentiras en aras de disimular su incapacidad para crecer; suelen hablar de fantásticos proyectos, negocios increíbles, grandes aventuras amorosas.

3.  Se sienten altamente seducidos por la juventud, etapa que suelen tener idealizada intentando negar su madurez.

4.  Tienen miedo a la soledad.

5. Altamente inseguros y con baja autoestima.

6. Su actitud se centra en recibir, pedir y criticar pero no se molesta en dar o hacer. Esto hace que viva centrado en sí mismo y en sus problemáticas sin preocuparse demasiado por lo que le sucede a las personas a su alrededor.

7. Consideran que el compromiso es un obstáculo para su libertad.

8. No adoptan la responsabilidad por sus actos mientras que los otros deben hacerlo por ellos.

9. Se sienten permanentemente insatisfechos con lo que tienen pero no toma iniciativas para intentar solucionar su situación. En palabras sencillas diríamos que es una persona que lo quiere todo pero no desea esforzarse para lograrlo.

10. Esto hace el afectado por el Síndrome de Peter Pan, necesite a su lado a otra persona que satisfaga sus necesidades; muchas veces este rol es encarnado por los progenitores, un hermano mayor o la pareja.