Pandemia del sida data de 1920

El origen de la pandemia del sida se remonta a la década de 1920 en la ciudad de Kinshasa, capital de la República Democrática del Congo, según una investigación que analizó el código genético del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).

Un equipo internacional de científicos se dio a la tarea de buscar el origen de la pandemia utilizando la arqueología viral y encontró que una “tormenta perfecta” -de crecimiento demográfico, sexo y ferrocarriles- favoreció la propagación del VIH.

En su informe, publicado este viernes en la revista especializada Science, investigadores británicos y belgas refieren una “fascinante visión del comienzo de la pandemia”, que solo atrajo la atención mundial hasta la década de 1980.

Detallan una combinación de factores como un comercio sexual rugiente, el crecimiento rápido de la población y agujas sin esterilizar utilizadas en las clínicas de salud, así como el uso generalizado del ferrocarril para el transporte de personas.

El VIH ha infectado a casi 75 millones de personas en todo el mundo y tiene una historia larga en África, pero el lugar donde comenzó la pandemia ha sido fuente de un interminable debate, hasta ahora.

Los científicos de las universidades de Oxford, Reino Unido, y de Lovaina, Bélgica, buscaron reconstruir el “árbol genealógico” del virus para averiguar de dónde provenía, analizando las mutaciones en su código genético.

“Usted puede ver las huellas de la historia en los genomas de hoy en día, se ha dejado un registro, una marca de mutación del VIH que no puede ser erradicada”, sostiene el profesor Oliver Pybus, de la Universidad de Oxford.

El VIH es una versión mutada de uno que afectaba a los chimpancés, conocido como virus de inmunodeficiencia de simios, el cual probablemente saltó “de especie” a través del contacto con sangre infectada durante la manipulación de carne de caza.

Pero el virus saltó en múltiples ocasiones y en uno de esos brincos se creó el VIH-1 subgrupo O que afecta a decenas de miles de personas en Camerún. Más tarde, se suscitó el VIH-1 subgrupo M, que infecta a millones de personas en todos los países del mundo.

La respuesta a por qué sucedió esto radica en la década de 1920, hacia el fin de los imperios europeos, cuando Kinshasa (llamada Leopoldville hasta 1966) era parte delCongo belga.

Fue una época de muy amplio y rápido crecimiento de la zona y los registros médicos coloniales muestran que hubo una alta incidencia de diversas enfermedades de transmisión sexual.

Un gran número de trabajadores varones se sentían atraídos por la ciudad, lo que distorsionó el equilibrio de género hasta que los hombres superaron a las mujeres dos a uno, lo que eventualmente llevó a un comercio sexual rugiente.

A ello, se suman las campañas de salud pública para tratar diversas enfermedades infecciosas con inyecciones, presuntamente utilizando jeringas limpias, pero sin esterilizar, además de que las redes férreas de transporte permitieron a la gente moverse rápido a zonas lejanas.

Según datos históricos, alrededor de un millón de personas utilizaban los ferrocarriles de Kinshasa a finales de la década de 1940, por lo que la propagación del virus hacia la vecina Brazzaville y la provincia minera de Katanga se produjo con rapidez.

Esas condiciones, que crearon la “tormenta perfecta”, duraron apenas unas décadas en Kinshasa, pero para entonces el virus ya estaba empezando a extenderse por todo el mundo.