En México es “urgente” garantizar la navegación de los menores por internet, ya que el país ocupa actualmente el segundo lugar en pornografía infantil, y por lo menos 40% de los que utilizan la web es contactado por pederastas.
“El asunto es sumamente delicado porque, según datos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), 4 de cada 10 menores de edad que navegan en internet llegan a ser contactados por un pederasta”, afirmó la directora general de Autorregulación del Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI), Lina Ornelas.
En el marco de la 33 Conferencia Internacional de Autoridades de Protección de Datos y Privacidad, la funcionaria del IFAI afirmó que los infantes son un grupo vulnerable, pues “un niño de 5 años quizás no sabe amarrarse las agujetas de los zapatos, pero sí sabe enviar un mensaje de texto”, sin sospechar los riesgos que puede enfrentar.
“Por ello es indispensable que la sociedad civil y las autoridades en protección de datos tomemos acciones inmediatas para establecer medidas que los protejan. Por un lado, hablarles de los riesgos a los que están expuestos, que aprendan a emplear el anonimato, utilizar seudónimos, cambiar contraseñas y no proporcionar información real cuando chatean con desconocidos”, subrayó Ornelas.
En la sesión, diversos activistas alertaron que por lo menos 150 mil niños mexicanos han sido enganchados a través de la web por grupos de pederastas que se dedican al tráfico de personas o que los utilizan en páginas de internet pornográficas.
Acoso en la red
Korina Velázquez, especialista en legislación, dio a conocer datos de un estudio realizado por BitDefender, y destacó que un pederasta, desde la primera vez que contacta a un niño, tiende a fotografiarlo o videograbarlo en un plazo promedio de 15 días.
Velázquez agregó que 89% de los padres de familia estima que sus hijos han sufrido acoso cibernético en alguna ocasión, y más de la mitad cree que sus hijos fueron “muy afectados” por esa situación.
El estudio de BitDefender se centró en evaluar frecuencia y contexto del acoso cibernético. Para ello utilizaron una muestra de mil 740 padres de cinco países.
Fuente: Milenio