El Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, celebró la garantía de los derechos humanos refrendados por las Fuerzas Armadas mexicanas, pues reconoció como prueba fehaciente de integridad y honorabilidad que “ante faltas graves” de algunos integrantes de esta esfera, su alto mando ofreció “una disculpa pública a la sociedad”.
Peña Nieto advirtió que portar el uniforme de la Patria conlleva el imperativo moral de mantener una conducta nota hable, implica el deber de conducirse con total apego a la ley y trae consigo la obligación de actuar con absoluto respeto a los derechos humanos.
El Primer Mandatario se refirió al hecho de tortura a una civil por parte de efectivos castrenses que se registró en Ajuchitlán, Guerrero (2015), y ante lo que el secretario de la Defensa Nacional, General Salvador Cienfuegos Zepeda, ofreció una disculpa pública a la sociedad.
“Como Presidente de la República y Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas expreso mi más amplio reconocimiento al general secretario Salvador Cienfuegos y al almirante Vidal Francisco Soberón por una visión y convicción compartida de promover decididamente la protección y defensa de los derechos humanos”, precisó
Durante la ceremonia oficial por el 154 Aniversario de la Batalla de Puebla en el Auditorio principal del Heroico Colegio Militar, pidió a los representantes de las Fuerzas Armadas recordar que “el prestigio y la grandeza del Ejército, de la Armada y de la Fuerza Aérea Mexicana se construyen y se reivindican todos los días y en todas sus misiones”.
Enfatizó que servir a México desde las filas del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea constituye un gran privilegio y también una enorme responsabilidad.
