El Presidente Enrique Peña Nieto visitó, en el Hospital Regional Militar de Mazatlán, Sinaloa, a diez elementos del Ejército mexicano que fueron lesionados durante el ataque que sufrieron a manos del crimen organizado, el viernes pasado en Culiacán.
Peña Nieto les manifestó su apoyo y solidaridad, así como sus deseos de una pronta recuperación.
También se reunió con los familiares de los otros cinco soldados que perdieron la vida durante estos mismos hechos violentos.
“Los soldados son ejemplo de fortaleza, de la gran templanza y el valor que tienen quienes integran nuestras Fuerzas Armadas. Son ejemplo, son inspiración para sus compañeros de armas”, dijo.
El Mandatario realizó un recorrido en las áreas de recuperación, terapia psicológica y terapia intensiva del hospital donde reciben atención médica los militares.
“Como presidente de la República, estoy más que reconocido con nuestras Fuerzas Armadas. Son un gran orgullo”, resaltó.
También les dijo que luego de esta situación vivida y tras la atención que reciben los ve “muy echados para adelante, con gran ánimo, resintiendo la pena de haber perdido compañeros de armas, pero ya deseosos de regresar nuevamente al trabajo”.
El convoy de 17 militares fue emboscado la madrugada del viernes 30 de septiembre por un grupo de por lo menos 30 hombres con armas de grueso calibre, incluso lanzagranadas.