El petting son sesiones largas y súper hot en donde la excitación se logra con besos, caricias, roces en todo el cuerpo y la masturbación mutua.
El petting no se aprende, el petting se hace y se practica. No hay una técnica ni un manual que lo explique sino que es un verdadero juego, es la propuesta ideal para que le pongas el toque diferente a tu vida íntima, se conozcan más a fondo y reaviven el placer.
Ambos tendrán que estar convencidos de hacerlo, podrán iniciar hablando sobre lo que te gustaría hacer, contarse qué los excita y qué zonas son las más sensibles. A partir de ahí, lo que la imaginación permita, todo vale. Puede haber besos, mimos, masajes, todo, excepto el sexo mismo.
Concentrarse en todo el abanico de posibilidades sensuales puede resultar muy erótico.