La Policía Federal (PF) retiró a los pocos maestros que se encontraban en la Plaza de la Constitución, entró por la calle de Moneda; los maestros dieron una breve respuesta con piedras y palos, pero al verse rebasados por elementos de seguridad corrieron dejando la Plaza de la Constitución.
Los policías federales con extinguidores y una de las tanquetas apagaban las fogatas que habían prendido los profesores.
En su ingreso al Zócalo, los federales fueron apagando las fogatas que habían prendido los jóvenes embozados y retiraron los tubos y cuerdas que mantenían en pie las tiendas de campaña.
En las calles de 20 de Noviembre y Madero se dieron pequeños enfrentamientos con petardos lanzados por los jóvenes hacia los federales, sin embargo, no hubo daños que lamentar.
