La Procuraduría General de la República lleva a cabo un peritaje este día a los restos mortales de Julio César Mondragón, normalista de Ayotzinapa que fue desollado el 26 de septiembre de 2014 durante el ataque a los estudiantes.
A petición de su esposa, la dependencia federal, acompañada de peritos del grupo argentino de expertos forenses y de la CNDH, llevará a cabo esta diligencia forense para determinar las causas de la muerte del joven y cómo es que sufrió el ataque al retirarle la piel del rostro y los ojos.
Además de estos especialistas en distintas ramas de la ciencia forense, asistirá como observador –y en su calidad de coadyuvante del caso Ayotzinapa– Carlos Beristain, uno de los cinco investigadores del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independiente (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).