Donald Trump, de ser el futuro presidente de Estados Unidos, continúa con su plan de construir el muro fronterizo, e incluso, ya cuenta con una estrategia.
“Se trata de hacer un pago único de entre 5.000 y 10.000 millones de dólares para asegurarse de que los 24.000 millones de dólares (en remesas) continúan llegándole año tras año”, comentó.
Además, planteó reformar la ley antiterrorista conocida como Patriot Act, con la finalidad de que la gente que realice una transferencia monetaria, presente una identificación para demostrar que está en el País de manera legal. Esto, afectaría directamente a las remesas de los mexicanos y sus ingresos.
No obstante, ese dinero que no se mande a México no sería el que se utilice para pagar el mundo, ese es tema aparte. La tirada es que México pague “por las buenas” por este muro.
Lo más sorprendente, es que tiene un plan muy establecido para la respuesta de los mexicanos ante sus propuestas, ya que Trump está seguro que la reacción de los mexicanos no será positiva. Sin embargo, su opción será: “pagas o pagas”. En total, la cantidad a cubrir sería de 5 mil a 10 mil millones de dólares.
Entonces, ¿cómo llegaríamos a un acuerdo?
Donald no promulgaría los cambios a la ley Patriot Act y regresaría las remesas, con tal de obtener a cambio el dinero para la construcción.
¿Qué opina Obama?
Al preguntarle por las ideas de Trump, el presidente actual de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que es “poco práctico” revisar detalladamente los dólares que salgan de Estados Unidos a México.
“En primer lugar, sería poco práctico. La idea de que vamos a poder seguir cada poco del dinero enviado a México a través de Western Union, en fin, buena suerte con eso”.
No sólo eso, sino también que al bloquear las remesas, se generaría una crisis en la economía mexicana, que provocaría una ola de migración.
“(El plan de Donald Trump es) algo que no está bien pensado y que simplemente se ha presentado para su consumo político (…) La gente espera que estos problemas se traten de forma eficaz, no esperan que la Casa Blanca presente propuestas a medio cocinar”, agregó.