¿Por qué nos besamos?

Los besos son una forma cultural del cariño, del afecto y del deseo. Sentir los labios húmedos, el movimiento de los mismos y la pasión arremolinada en el momento son ingredientes que vuelven de un beso con amor todo un símbolo de la pareja.

Un buen beso quema entre 2 y 3 calorías por minuto, descargando epinefrina y noreprinefina haciendo que tu corazón lata más rápido, además de estar relacionado con la disminución del llamado “colesterol malo” y con una disminución de la percepción del estrés.

Los científicos han estudiado este curioso comportamiento del ser humano durante décadas, sin llegar jamás a una conclusión universal y contundente. Hay quienes creen que el beso es una mera construcción cultural, el cual fue aprendido por algunos grupos a través de la necesidad de la transmisión de comida por parte de madres a hijos. La existencia de tribus que no se besan es prueba de ello.

Sin embargo, hay otros científicos que opinan que estas tribus inicialmente se besaban, y que fue la cultura lo que extinguió el hábito. Estos científicos son los que creen que el beso es un acto de carácter instintivo, el cual es anterior a la totalidad de nuestra especie.

Recientemente salió a luz una nueva teoría mucho más interesante, la cual afirma que las mujeres besan a los hombres para olfatear inconscientemente a un potencial compañero sexual. Claro que a la hora de besar las teorías no importan.