La única cosa sorprendente de la renuncia de Steve Jobs, fue el momento. ¿Por qué ahora? Por su salud, tal vez. O tal vez porque ahora es el mejor momento para la transición en la compañía.
Apple nunca había estado tan fuerte. Hace un mes, reportaron ingresos trimestrales récord, aún sin haber lanzado productos nuevos, sin que fuera regreso a clases ni vacaciones. Fueron, por un breve periodo de tiempo, la compañía más valiosa del mundo.
La compañía se sentirá en buenas manos. Porque lo está.
Y en un mes, estarán lanzando el próximo iPhone, posiblemente junto con otro iPhone más barato. Si esto sucede, Apple habrá dejado de ser un lujo yuppie para convertirse en un producto “popular”.
Si hubieran esperado más tiempo, el anuncio del iPhone 5 hubiera sido opacado por lo recuerdos de Steve Jobs; con un mes de distancia, el nuevo CEO Tim Cook, puede tomar el control solo. Puede mantener los reflectores en el iPhone en vez de en la sombra de Jobs.
Sí, hay una posibilidad de que Steve Jobs haya renunciado ahora por motivos de salud. Pero esperamos que no sea así. Y honestamente, no hay muchas razones para pensarlo. Porque esto parece calculado, planeado, de la mejor manera posible para suceder en el mejor momento posible.
Fuente: Gizmodo
