A todos nos gusta ver pornografía, sin embrago es un hecho que en más de una ocasión se hace incómodo y hasta peligroso navegar por ciertos sitios que la ofrecen al abrirse otros sitios o por la descarga de aplicaciones maliciosas
Según la firma de seguridad Blue Coat, 25 por ciento del malware en dispositivos móviles proviene de sitios web para adultos.
Si consultas una página que ya es de tu preferencia sé cuidadoso al escribir la dirección del sitio web y verifica que sea la correcta una vez que accedas al sitio. (Una de las formas más comunes de acceder a sitios maliciosos es tecleando mal el sitio)
Al navegar en un smartphone es fácil equivocarse al escribir y esto podría llevarte a un sitio malicioso. Además, en la mayoría de los navegadores queda oculta la dirección mientras consultas una página, lo que dificulta distinguir si la dirección es segura.
Evita registrarte en estos sitios, pero si lo haces, desconfía si te piden tu dirección, número telefónico, datos de otros contactos para invitarlos, número de tarjeta de crédito o débito y contraseñas de otros servicios como podría ser Facebook. Lo más recomendable es que no proporciones estos datos. (A menos que estés 100% seguro y consiente que deseas hacerlo) podrías tener una tarjeta especial para la compra de pornografía o con un crédito limitado, tampoco se trata de tenerle miedo a todo, es un hecho que pornografía de calidad tiene un costo y hay que pagar por ello.
Por ello si vas a comprar alguna membresía, deben contar con logotipos que avalen la seguridad de las transacciones como Norton Secured si tienen ese sello se trata de compañías serias que se dedican a la venta LEGAL de contenido pornográfico.
Dependiendo del tipo de dispositivo deberás de descargar soluciones de seguridad para tui móvil y siempre estar consciente de los riesgos que por desgracia los malosos aprovechan de las ganas de ver pornografía del mundo.
Si visitas foros, chats, aplicaciones o en comentarios procura usar nicknames que en absoluto tengan que ver con tu dirección de correo electrónico o cualquier datos personal que pueda brindar alguna pista a los cibercriminales.
El ver pornografía es lo más común del mundo y no tiene por qué ser un dolor de cabeza, a menos que así lo decidas: p.