El Partido de la Revolución Democrática (PRD), debió emitir un dictamen sobre los candidatos aprobados durante la sesión del Consejo Estatal de Veracruz, este documento no existe.
Y no existe por dos razones: de los 70 candidatos para alguna de las alcaldías que le correspondieron al PRD, como parte del acuerdo de coalición con el PAN, según comentó Mara Cruz, secretaria del CEN, 58 fueron impugnados.
Tampoco cuenta con la ruta estratégica y el plan electoral. En pocas palabras no está preparado para los próximos comicios en cuatro entidades del país.
Sobre los delegados especiales, que son los que determinan en ciertos casos el rumbo de las campañas de los candidatos, el PRI, el PAN, Morena y hasta Movimiento Ciudadano, que no presentó candidato al Estado de México, los nombraron desde el año pasado, pero en el PRD este tema se pospuso hasta que las campañas se les vinieron encima.
Representantes del partido han señalado que la confrontación interna incidió para que aplazara el nombramiento de Alejandra Barrales, presidenta nacional, como delegada en el Estado de México; de Jesús Valencia, Verónica Juárez y Carlos Torres Piña, para Nayarit; Luis Arias para Coahuila, y para el caso de Veracruz, “nunca se le dio el espacio correcto” a una comisión de seguimiento, integrada por seis perredistas de distintas corrientes.
