“Al menos 10 por ciento de los expendios de combustible han solicitado racionar las ventas de 10 a 40 litros por consumidor”, dijo Ricardo Sheffield, titular de la Profeco.
La propuesta de los vendedores de combustibles, para no tener conflictos con el consumidor, es vender una cantidad fija, ya sea 10 litros, 20, 30 o 40 litros, según el abasto.
La petición se hizo a la Profeco de manera verbal, informó Sheffield, y en todos los casos se ha autorizado la venta racionada.
Aclaró que la medida es temporal porque, en lo general, no se puede limitar la venta.
Indicó que la Profeco mantiene vigilancia en las gasolineras de los estados con crisis de desabasto.