¿Qué pasará con Apple tras la salida de Steve Jobs?

No puede haber muchas dudas ahora: los accionistas de Apple y sus clientes deben prepararse para un mundo sin su fuerza motriz.

La noticia de que Steve Jobs ha presentado su renuncia como consejero delegado seguramente sea algo que los inversores temían desde su decisión en enero cuando anunció baja médica, y aunque seguirá como presidente, las declaraciones de Jobs de que “ha llegado el día” en el que “ya no puedo seguir cumpliendo mis obligaciones y expectativas como consejero delegado de Apple” sólo han confirmado los peores temores sobre su salud.

El reto consiste ahora en evaluar el impacto a largo plazo. Aunque es poco probable que el empuje de Apple se resienta a corto plazo  no hay garantías de que pueda mantenerlo en el futuro.

Algunos mercados aún no se han conquistado, especialmente Hollywood y sin las relaciones de Jobs allí, Apple podría tener dificultades para cambiar esto.

La clave está: si el nuevo consejero delegado, Tim Cook, puede evitar un éxodo de talento en el próximo año, el alto valor de las acciones de la compañía probablemente continúe enriquecido a muchos ejecutivos.

Dicho esto, los temores sobre la salud de Jobs ya se reflejan en el precio de la acción. Antes incluso de conocerse la noticia el miércoles por la noche, los títulos de Apple, excluyendo su efectivo, eran una ganga, en 9,2 veces los beneficios fiscales previstos para 2012. Tras caer un 5% en unas horas, la acción se situaba en 8,6 veces.

Pese a que Jobs lega unas perspectivas sólidas a corto plazo, la pérdida de su presencia capital como consejero delegado puede hacer que el valor se abarate aún más en el período venidero.

Fuente: Expansión