Hoy se anunció que es ya un hecho que los bancos Banorte e Ixe se fusionarán, y así el Grupo Financiero Banorte-Ixe será el tercero más grande en México; será el único grupo del país que esté bajo control de accionistas mexicanos. Parecen ser buenas noticias.
Esta es la primera operación bancaria en la que la adquisición de un banco queda en manos de otro banco mexicano; hay que recordar que la mayoría de los bancos que operan en México operan con capital extranjero. Bancomer, considerado el mayor banco de México, pertenece al Banco Bilbao Vizcaya, de procedencia española; en el segundo lugar, Banamex, pertenece al estadounidense Citigroup.
En principio los consumidores no tendrán de qué preocuparse, pues se supone que Banorte se mantendrá como el banco especializado en el menudeo con muchas sucursales; e Ixe continuará como un banco más pequeño para clientes de alto nivel.
Habrá que esperar a ver si esta fusión resulta positiva para los consumidores, que son los que sentirán los resultados en sus cuentas de banco. Por lo pronto, es refrescante ver que los bancos mexicanos toman fuerza, y se rompe, ligeramente, con el monopolio de los bancos extranjeros en nuestro país.