Hasta la noche del 1 de noviembre del 2007, Amanda no era más que una estudiante norteamericana de veinte años. Vivía en Seattle, ciudad hermanada con Perugia. Inscrita en la Universidad de Washington, llega a Italia para asistir a un curso de italiano, gracias a sus muy buenas notas.
Sus compañeras de curso de Estados Unidos hablan de una chica diligente, generosa, hasta romántica. Ninguna de ellas la define jamás como violenta.
Amanda es una buena estudiante y una gran jugadora de fútbol. Pero le gustan también las fiestas, por supuesto. Nada más al llegar a Perugia hace muchos amigos, gracias a su apariencia física bastante imponente. Vive la atmósfera de la noche, en pubs y locales nocturnos. Y comparte un piso con Meredith, la víctima. Una convivencia al parecer tranquila, incluso divertida. Como dice también su exnovio Raffaele Sollecito, le encantaba cocinar tartas, tocar la guitarra y salir de fiesta.
Amanda Knox ha abandonado ya Italia. Ayer fue declarada inocente después de cuatro años encerrada en una prisión italiana acusada de haber asesinado junto a su ex novio, Raffaele Sollecito, a la joven británica Meredith Kercher.
Llegó a las 9.30 horas al aeropuerto de Fiumicino, a las afueras de Roma, donde embarcó, junto a sus padres, en un vuelo de British Airways con destino primero a Londres para, desde allí, viajar a Seattle.
¿Pero quién es realmente Amanda Knox? Mucho ha cambiado tras ser acusada del asesinato de su compañera Meredith Kercher y tras vivir en la cárcel. La chica, que hoy tiene 24 años y que fue condenada a 26 años de prisión -junto Raffaele Sollecito, y el africano Rudy Guede-, se ha vuelto famosa, estando siempre bajo la atención de los medios de comunicación.
De sí misma habla en el libro ‘Yo voy contigo -entrevistas con Amanda Knox en la cárcel’, una especie de autobiografía que se inspira en sus diarios, escrito por Rocco Girlanda, diputado y presidente de la Fundación Italia-EEUU, que ha conversado reiteradamente con la chica en la cárcel después de ser condenada.
En las entrevistas recogidas en el libro que se publicó hace un año, habla de sus intereses, como el cine, montar en bicicleta, el estudio de idiomas o la escritura.
Habla de religión, incluso de la posibilidad de vida extraterrestre en el universo. Y de sus deseos: un marido y adoptar un niño. Dijo que en la cárcel recibe muchas cartas, incluyendo propuestas de matrimonio. Y “todo el mundo me dice que soy famosa, y yo digo que no soy Angelina Jolie”.
Pero no fue sólo el libro. La serie “Amanda Knox — Murder on Trial in Italy“, basada también en el crimen de Perugia, tuvo un éxito fulminante: fue seguida por casi tres millones de estadounidenses. La joven actriz italoamericana Hayden Panettiere interpretó a Amanda. Tras esta cinta, se publicó un documental de una hora con el título “Beyond the Headlines: The Amanda Knox Story“, seguido por 1,9 millones de espectadores.
Fuente: elmundo.es
