Las especulaciones sobre la identidad de este usuario de la red social van desde que es una organización de varias personas ubicadas en diferentes partes del mundo hasta que se trata de un funcionario del gobierno o un miembro de la realeza que está filtrando información.
Desde su primer tuit, en diciembre de 2011, @mujtahidd ha publicado detalles sobre la supuesta corrupción de la monarquía saudita y el conflictivo juego de poderes que se gesta dentro de la élite real por la eventual sucesión del rey Abdalá bin Abdelaziz, quien tiene 88 años.
“Tanto es el nivel de detalle de la información que es difícil no tomarla en serio”, dice Abdirahim Saeed, periodista del servicio árabe de la BBC.
En este escenario, y en medio del severo hermetismo que caracteriza a las autoridades, @mujtahidd ha sido un estilo de revolución para muchos sauditas que, según él, “comparten mi interés por exponer la corrupción y pelear contra el engaño y la hipocresía”.
— ¿De dónde saca su información?, le pregunta BBC Mundo.
— Sobre todo de dentro de la familia real, pero con el tiempo he creado una red más grande en muchos ministerios y embajadas. Algunas veces la gente voluntariamente me da información confidencial o documentos.
— ¿Cómo verifica la información que recibe?
— Algunas fuentes no las tengo que verificar por su credibilidad, pero otras sí y hay cosas que no publico. Tengo dos tipos de pruebas. Una es hablar de un evento con detalle de las personas, el tiempo y el espacio y después ocurre como lo conté. Otra es presentar documentos.
— ¿Por qué no revela su identidad?
— Toda la idea colapsaría
— ¿A qué se refiere? ¿Cuál idea?
— En nuestra cultura, por la intimidación del régimen, la identidad ambigua genera un sensacionalismo que fomenta el interés de la gente. En estos temas sensibles, la gente no quiere que la puedan vincular a uno. Que tan solo me sigan es un riesgo. Pero si mi identidad es secreta la gente tiene la salida psicológica de pensar que me siguen por curiosidad.
— Entonces la posible represalia del gobierno no tiene que ver con su anonimato…
— Yo estoy a salvo y es probable que el régimen conozca mi identidad. Pero no la pueden revelar. Reconocer que alguien como yo sabe todos estos detalles intrincados es un desastre.
— Pero si saben quién es usted, ¿podemos descartar la teoría de que es un infiltrado?
— Sin comentarios.
Fuente: BBC Mundo