Acura ha traído algunos cambios interesantes a este nuevo modelo que completamente diferente a la generación pasada, aunque mantiene algunos rasgos de diseño. Uno de los detalles más llamativos es la configuración de las lámparas en la parte frontal. Acura utiliza lampas de LED para la iluminación principal y las ha colocado en lo que ellos llaman Jewel-Eye.
En cuanto a motorización, se trata de un V6 de 3.5 litros de inyección directa que genera 310 caballos de fuerza con transmisión automática de seis velocidades y para esta generación la tracción está únicamente en las ruedas delanteras. Y aunque el tren motriz no emocionará a quien abra el cofre el sedán insignia de Acura sí tiene tecnología interesante en su construcción. La marca está utilizando un nuevo sistema llamado por Acura Precision All-Wheel Steer (P-AWS), en donde se tiene un control en unos cuántos grados de las ruedas traseras, dando más estabilidad al RLX sobretodo a velocidades de autopista.
El interior resulta bastante confortable y con todos los accesorios que se esperarían en un auto de su segmento. Cuenta con las asistencias modernas para la conducción como el radar para el control de velocidad de crucero y las comodidades en el interior como un sistema de audio Krell además de dos pantallas en la consola central con amplia información de todos sus sistemas. El precio es de 888 mil pesos, un precio bastante elevado considerando la fuerte competencia de las marcas alemanas, pero quizá la buena reputación de Acura sea un punto a favor para sus compradores.
Fuente: Automóvil ONLINE
