Robots que detectan el mal aliento y pies olorosos

Las máquinas utilizan sensores disponibles comercialmente, lo que demuestra cuánto ha evolucionado la tecnología de olfatos artificiales, que ya estaba disponible a comienzos de la década de 1990.

Los robots fueron desarrollados por la compañía CrazyLabo y el Kitakyushu National College of Technology, utilizando una tecnología que va mucho más allá de esta propuesta claramente lúdica.

El funcionamiento de los robots se basa en sensores capaces de crear huellas químicas que pueden hacer coincidir con aromas específicos. La información es procesada por computadoras dentro de las máquinas, que a su vez controlan las respuestas de los robots.

Son los primeros productos anunciados por CrazyLabo, que prevé hacer dinero alquilándolos para eventos. El presidente de la compañía, Kennosuke Tsutsumi, cuenta que la inspiración para crear las máquinas le vino por las quejas de su familia sobre su olor corporal.

La holandesa Enose está desarrollando Aeonose, un pequeño kit de diagnóstico basado en olores, diseñado para hacer intentar detectar tuberculosis, asma y cáncer de garganta. Alpha Szsenszor, con base en Estados Unidos, está trabajando en un equipo para intentar detectar cáncer de pulmón y otras enfermedades analizando el aliento humano.

Y en la Universidad de Bristol, en Reino Unido, tienen el proyecto Lector de Olores, que analiza los vapores recolectados de muestras de heces de pacientes para intentar identificar las causas de diarreas.

Con todo esto, las tecnologías actuales todavía no logran el mismo nivel de sofisticación que la nariz humana.

 

Fuente: BBC Mundo