El estrecho de Cook, que separa las islas norte y sur de Nueva Zelanda, fue sacudido por un sismo de 6.2 grados.
Las autoridades no dieron la alerta de tsunami o informe de víctimas mortales.
El Servicio Geológico de Estados Unidos registró el epicentro a 236 kilómetros de profundidad, en el mar, y a 173 kilómetros al norte noroeste de Wellington, la capital del país.
Se sintió en Wellington, Napier, Manuwatu y hasta en Christchurch, poblaciones ubicadas en las islas norte y sur del país.
Fuente: RPP